En el centro de la galaxia, un cristal de tiempo solido concentra toda la existencia. Irradia informacion en rayos luminicos omnidireccionales. Libres, las almas se elevan por encima del cielo, abarcando cada vez mas percepciones. Anillos de espacio secuencial se completan uno tras otro. En el ojo de la serpiente, el reflejo de todos los fines y finales. La ultima pulsacion de un cosmos que se hace caos. Hermes T. predicando invenciones, forjando el mundo a su imagen y semejanza. Siete mil millones de cuerpos parados sobre una roca en algun lugar de la nada.
La serpiente cerro sus ojos.
Estaba agitado, quise hablar, pero ninguna palabra poseia ya significado. Ningun pensamiento podia estructurarse a veintiocho letras y algunos simbolos de entonacion.
La serpiente mordio mi brazo, recordandome que "eso" no era ni mas ni menos real o verdadero que la maquina transmisora de entretenimientos o los "parientes" de Mildred.
¿Que era "eso"?¿Que habia pasado ahi?¿Quien era yo?¿Que era yo?
Pero poco importa, porque todas esas preguntas fueron formuladas en pasado.
Por eso te saludo, desde este lado de la secuencia.
Vibraciones e intensidad
G.
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